Leonor Soza, sommelier Chilena radicada en Uruguay, nos cuenta sobre cuáles son sus 5 imperdibles.

1.- Viña Aquitania, Lázuli, Cabernet Sauvignon, Valle del Maipo:  Para mí, uno de los mejores Cabernet Sauvignon de Chile. Directamente desde el piedemonte de la Cordillera de los Andes, encontramos un vino elegante, que se deja beber y se impone tal como lo hace su paisaje en la viña en Peñalolen. Nos representa en lo más puro, además tiene un gran potencial de guarda y un precio más que accesible. Un icono sin precio de icono, un Cabernet chileno aquí y en la quebrada del ají. ¡De libro!

2.- Casa Bauzá, Presumido, Carmenere, Valle del Maipo: Debo decir que siempre me ha gustado el trabajo de Natalia Poblete, su enóloga. Ya sea en su proyecto personal como en Casa Bauzá. Este Carmenere me parece una gran tarjeta de presentación de la cepa, maduro en el punto exacto, amable, sedoso, cautivador. Con todo el derecho a ser presumido, y ojo, que no soy una devota de la cepa, pero a este vino como a las personas que presumen, hay que conocerlo para ver lo bueno que es. 

3.- Bisogno Wines, Proa, Riesling/Pinot Gris, Cauquenes:  Me gusta Cauquenes, su vino, su historia, su gente. Y Diego Morales se merece un aplauso con este vino que, en calidad precio es insuperable si pensamos que es un blanco no tradicional. Para llevarlo del viñedo a la costa del Maule, me lo imagino en Pelluhue o Curanipe acompañando una preparación a base de mariscos cremosos o simplemente refrescando una tarde de playa.

4.- Semillón Sessions o Semillon Day: No, no es un vino, es una ocasión creada por algunas viñas – hoy se mantienen 3 – que “hacen bien la pega” con esta cepa: Bouchon, Aresti y Carmen, 3 valles: Curicó, Maule, Colchagua (y uno DO Apalta), todos con distintas vinificaciones, tan interesantes y de personalidades diversas que no puedo recomendar más que buscarlos y apoyar esta revancha de una cepa que un día fue la blanca más plantada en Chile. ¡Volumen y mucha personalidad, no voy a elegir uno porque en la variedad está el gusto y ya no estamos para tomar blancos comunes!

5.- Bodega Bouza, Albariño, Montevideo (Uruguay): ¡Difícil misión elegir un solo vino uruguayo! Pero dentro de los blancos, este Albariño me parece más que representativo de la variedad y del potencial de esta cepa en tierras charrúas. Sin duda el clima privilegiado lo hace ser aromáticamente muy expresivo, y en boca mineral y refrescante, con un punto de equilibrio perfecto en la acidez. Bouza es una bodega familiar, bien posicionada a nivel nacional e internacional y sus vinos son de corte tradicional, muy elegantes y delicados.