Artesanía en la cocina. Así se llama la propuesta de Rodrigo Acuña, Chef Ejecutivo de Viña VIK, en el Valle del Cachapoal. Productos con sabor y elaboración propia.

“Cada vez más me sorprende el uso de productos olvidados, aquellos que por no cumplir con características estéticas han sido eliminados de nuestra dieta, como es el caso del tomate rosado”.

“WastED es una comunidad en el que están involucrados chefs, agricultores, pescadores y diseñadores, entre otros, que trabajan juntos para rescatar los llamados “desperdicios” en todos los eslabones de la cadena alimentaria. Hoy estoy trabajando con un grupo de personas para crear una versión chilena”.

“Es necesario destacar al productor local, son la base de los platos de nuestro menú, como Fullu, pescador de Pichilemu, a Elsa, dueña de las salinas de Cahuil, a Don Pimpe, al agricultor en Calle Mena, a Jose Miguel, productor de aceite de oliva, las algueras, los panaderos, queseros y longaniceros”.

“Parte importante dentro de la propuesta de VIK es la artesanía en la cocina, productos que elaboramos en nuestra cocina, como el jamón crudo, salmón ahumado, salames, pancetta, helados, croissant, yogurt y mostaza entre otros, marcan la diferencia dentro del menú”.

“Chile es mucho más que Cabernet Sauvignon o Merlot. Me ha sorprendido mucho el avance de las “nuevas cepas” y lo que está haciendo, por ejemplo, Gonzalo Moraga y su empresa turística “Wine and Barrels”.