Se llaman @Noquisdel29 (están en Instagram y Facebook) y hacen comidas clandestinas para celebrar una de las tradiciones más bacanes del mundo.

Cuenta la leyenda que San Pantaleón peregrinaba por Italia haciendo de las suyas (milagros) y un 29 de julio llegó muerto de hambre a pedir comida a unos campesinos muy pobres y ellos lo invitaron a sentarse a la mesa. Cuando levantaron los platos encontraron monedas de oro.

La tradición italiana de comer ñoquis los 29 de cada mes y poner un billete bajo el plato, llegó a Chile hace varios años y el chef argentino Warhol Olivera la sigue de una manera inolvidable. Todos los 29 prepara una cena clandestina, en lugares entretenidos donde se puede compartir las mesas con extraños, tomar buenos tragos y poner unos pesitos debajo del plato.

El menú era una entrada de ceviche de champiñones. Después unos excelentes ñoquis con salsa pomodoro, muy suaves, como masticar lentamente una dulce venganza. De postre un pavlova con frutas, que a pesar que nunca nos llamó la atención, la comimos completa.

El almuerzo o cena cuesta $15.000. Lo encontramos un pelín caro, pero todo es hecho a mano y en el momento, entonces se entiende. Los tragos son aparte, como un gran balde de gin con gin por $3.500.

Facebook ñoquis del 29 / Instagram @noquisdel29

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