Panes parrilleros

 

«Yo odiaba las prietas, pero la verdad es que nunca las había probado… hasta que las probé y ahora me las repito» ¿Cuántas veces has escuchado este testimonio? Yo miles, incluyendo el mío de años atrás. Las prietas muchas veces son más odiadas por su origen que por lo que realmente son: unas bombas cargadas de amor. Lo mejor es que combinan increíblemente bien con varios sabores. ¿Con papas? Claro que sí. ¿Con un pebre? ¡Ah no si no! ¿Y qué tal con una pastelera de choclo? Saca este ilustre ejemplar para afuera en el próximo asado y deja a tus convidados en silencio.

30 minutos / muy fácil / para 8 prietas

 

1 bolsa de choclo congelado / 500 g

2 puñados de hojas de albahaca fresca

1 ají verde

¼ taza de aceite de oliva

Sal de mar y pimienta fresca

Marraquetas

 

+ Minipimer

 

Llena con agua una olla mediana y ponla a calentar. Cuando el agua hierva, echa dentro el choclo y cuando vuelva a hervir cuécelo por 4 minutos y después cuélalo.

Traspásalo al recipiente de la minipimer, agrega el aceite de oliva y deja reposar hasta que se enfríe. Mientras, corta el ají verde por la mitad a lo largo y, raspando el interior con una cuchara chica, deshazte de las venas y pepas. Luego pícalo en trozos irregulares.

Cuando el choclo esté a temperatura ambiente, echa dentro del recipiente la albahaca, el ají verde, y unas pizcas de sal y pimienta. Procesa hasta dejar un puré cremoso. Prueba cómo está de sal y añade un poco más, si es necesario, antes de licuar una última vez.

Traspasa la mezcla a un lindo bol y ponlo cerca de la parrilla a esperar que las prietas estén infladas y burbujeantes, y las marraquetas un poco tostadas.

 

Panes parrilleros