Los vinos Late Harvest o cosecha tardía

La pregunta que siempre nos hacen es: ¿por qué un Late Harvest es dulce? ¿Cómo se llega a ese tipo de vinos? Primero aclaremos que Late Harvest significa vendimia tardía. Los racimos se dejan más tiempo de lo habitual en la planta, de manera que los granos de uva concentren más azúcar.

Los cosecha tardía o Late Harvest tienen tal cantidad de azúcar, que las levaduras que se utilizan en la fermentación no logran transformarla toda en alcohol, resultando un vino dulce natural sin ningún agregado extra. En general tienen un porcentaje bajo de alcohol y cuando se combinan con algunos postres y quesos resulta un maridaje muy placentero en el paladar.

Las variedades que se utilizan para los vinos de cosecha tardía en nuestro país, por lo general son: el Sauvignon Blanc, la Moscatel de Alejandría, el Gewürztraminer, el Riesling y el Semillón. Tienen un color amarillo/dorado producto de la oxidación de las pieles de las uvas. Son mucho más espesos que un vino blanco normal y el formato con que se presentan en el mercado es mayoritariamente en media botella o 375 cc. Se beben idealmente en copas más pequeñas y la sensación en boca es de mucha untuosidad.

Se tiende a confundir los cosecha tardía con los vinos botritizados o de podredumbre noble, como los de la región de Sauternes en Francia, quizás los vinos dulces más famosos del mundo. Los procesos son diferentes, pero tienen alguna relación. Es muy importante la temperatura para beberlo. Hay que sacar la botella fría del refrigerador y si estamos en verano, mantenerla en una cubeta con hielo (lo ideal es entre 8° y 10° si tienen un termómetro a mano).

 

Los vinos Late Harvest o cosecha tardía