Los mejores vinos del 2016
Conversamos con seis enólogos y productores de vino para que seleccionaran sus tres mejores vinos del año. ¿El resultado? Un gran resumen de 18 etiquetas que nos muestra una panorámica actual del vino chileno, amplia y diversa, donde están incluidos desde el País, hasta el Cabernet Sauvignon, pasando por el Carignan, la Garnacha y el Pinot Noir. ¡Vayan preparando sus copas para brindar por un gran 2017!
Diciembre es época de recuentos y análisis. Nuestro escena de vinos, pequeña aún, vive años vertiginosos y el 2016 lo confirma. El año partió complejo (ver la columna de Matías Cruzat), pero con el pasar de los meses muchos se fueron dando cuenta que la cosecha más temprana traería beneficios para los tintos.
La lista de los mejores vinos del año, seleccionados por seis enólogos, no deja de llamarnos la atención. Una selección diversa, que no se centra en unas pocas cepas, sino que nos habla de un país productor que poco a poco comienza a sacarle provecho a su geografía y a la influencia del factor climático.
Es notorio como el norte marca una tendencia, con seis de los 18 vinos apuntados en estas páginas. A pesar de las dificultades provocadas por una larga sequía, los vinos que se están haciendo en el norte, léase valles del Elqui y Limarí, definen muy bien su carácter varietal. Syrah especiados, Sauvignon Blanc y Chardonnay con notas minerales son algunos de los buenos ejemplos.
Las cepas mediterráneas brillan en los valles del sur, como Maule e Itata, un patrimonio que estuvo dormido por muchos años y que ahora sale del anonimato. La cultura del secano interior reinstalada como tema recurrente en medios especializados tanto en Chile como en el extranjero. Las viejas parras de Carignan se cuidan hoy como un tesoro.
La Garnacha, la cepa de origen español, que luego se propagó por el sur de Francia, pasó del olvido a ser nuevamente protagonista. Actualmente la variedad es responsable de algunos de los tintos más celebrados en España y la misma Francia. En Chile está pasando algo similar. Un resurgimiento que también puede verse en Argentina. Pase y dese una vuelta, porque en estas páginas le presentamos dos buenas Garnachas.
Renán Cancino
Bodega El Viejo Almacén de Sauzal
1.- Aristos, Duquesa, Chardonnay 2012. Uno de los mejores Chardonnay de Chile, donde la condición climática de la Cordillera en el valle del Cachapoal, supera largamente a la costa. Es austero en nariz y tiene una boca sólida y elegante.
2.- Cuesta Chica de Alcohuaz, Garnacha 2015. Pronto estará en el mercado. Hay unas botellas dando vueltas por ahí que atraen inmediatamente. Una acidez envidiable. Otro vino con una boca sólida, atrevido. Un tinto de cordillera y parte de la bodega en Elqui de Viñedos de Alcohuaz.
3.- Garage Wine Co, Carignan, Truquilemu 2014. Muy buen Carignan. Viene de la zona de Sauzal, donde vive Cancino. Equilibrada acidez, estructura y elegancia. Sauzal ha ganado reputación en Chile, con vinos de alto nivel y gran sentido de origen.
Francisco Baettig
Errázuriz Wines
1.- Viñedos de Alcohuaz, RHU 2012. Vino con personalidad. Notas a incienso, cenizas, lavandas, hoja de grosellas. Un tinto intenso, de buena estructura, con nervio, tensión, filoso y seco.
2.- Maycas, Pinot Noir, San Julián 2014. El norte mostrando todo su potencial con este Pinot Noir de buen color, tipicidad, con fruta fresca, que luego da paso a algunas notas ahumadas. Hay tensión, acidez, algo de sangre y un poco salado, seguramente por esa cercanía al océano.
3.- Tabalí, Roca Madre, Malbec 2015. Tiene un color intenso y mucha tipicidad. Abundan las notas florales, como violetas y lavandas. Es como un jugo que se estira al final del paladar por unos segundos. La altura donde están ubicados los viñedos le dan una potente impronta de tensión y acidez.
Rafael Urrejola
Undurraga
1.- Maquis, Cabernet Franc 2013. En un estilo más clásico en cuanto a tipo de vinos, variedades y zonas, aunque con una cepa no tan conocida aún, este Cabernet Franc llama rápidamente la atención por su tipicidad, complejidad y estructura. Bueno, bonito y a buen precio.
2.- Cancha Alegre, Garnacha 2015. Imposible desconocer el aporte que está llegando desde el sur, especialmente de nuevos y pequeños productores locales. Uno de los mejores ejemplos es esta Garnacha. Un vino fresco, largo y crujiente, donde se nota su manufactura artesanal de manera limpia y precisa.
3.- Bodegas RE, Enredo 2015. Cada vez más vinos en este estilo, que se conoce como vino naranja, porque su color se lo da la fermentación y crianza con los orujos. Enredo no solo es novedoso, sino que extremadamente único y audaz.
Roberto Henríquez
Roberto Henríquez Vinos Naturales
1.- Bodega Yumbel Estación, País Pipeño 2016. Mauricio González, su productor se ha convertido en uno de los líderes de los vinos naturales en Chile, aprovechando las viejísimas parras de País que hay en su zona.
2.- Cacique Maravilla, País Pipeño 2016. Manuel Moraga y sus tintos Cacique Maravilla conquistaron a bebedores de todas partes con la simplicidad del pipeño: puro frescor, simplicidad y acidez. Notas ahumadas en nariz y fruta roja en boca.
3.- El Viejo Almacén de Sauzal, Carignan 2014. Uno de los fenómenos más interesantes fue la irrupción de las cepas mediterráneas. El viticultor Renán Cancino aplicó solo metodología tradicional en este Carignan, que viene del secano del Maule. Rústico en boca y con esas notas terrosas que caracterizan a la variedad. Un rescate de la cultura del secano interior.
Germán Lyon
Pérez Cruz
1.- Gemma, Método Tradicional, Brut. Es el hermano menor de Azur, la primera bodega especializada en elaborar espumantes con método tradicional en Chile, con denominación de origen del Valle del Limarí. Burbuja muy fina, con notas a pan y levaduras, que no siempre se encuentran en los espumantes. Manzanas verdes en nariz.
2.- Laberinto, Cenizas, Sauvignon Blanc 2016. Excelente combinación de tensión y peso en boca. Su mineralidad la dan los suelos de cenizas volcánicas donde están plantadas las parras, en la cordillera del Maule. Es uno de los mejores Sauvignon Blanc de Chile, con un carácter único.
3.- Sideral 2013. Una gran mezcla de Cabernet Sauvignon, Carmenère, Syrah, Petit Verdot y Cabernet Franc del Valle de Cachapoal. Vino de gran frescura y con mucho sentido de origen. Sideral es un tinto de corte moderno, con un meticuloso trabajo de vinificación.
Julio Bastías
Matetic
1.- Veramonte, Chardonnay, Supertuga Block, 2015. Este Chardonnay de Veramonte viene de cuarteles seleccionados que tiene la viña en Casablanca. Tiene una nariz muy limpia, expresiva, con notas minerales y flores nativas. Los suelos de granito fracturado y arcilla permiten a este Chardonnay expresar su máximo potencial.
2.- Viñedo Chadwick 2014. El primer vino chileno que logra 100 puntos por parte de un crítico extranjero, otorgado por James Suckling. Es un vino que resume la fuerza y la elegancia al mismo tiempo. Tiene un cuerpo refinado, complejo y de larga persistencia.
3.- Tabalí, Reserva Especial, Pinot Noir 2013. Otro proyecto que no hace más que reafirmar el potencial del Valle del Limarí en el norte de nuestro país. La nariz despliega notas a frutas y especias. Buen balance y delicada acidez.