Gratín de papa rallada y boloñesa

4 personas • 1 hora

  • 4 papas medianas
  • 1 bandeja de carne molida
  • 1 tarro de salsa de tomates (400g aprox, acá usé una con berenjenas)
  • ½ cebolla
  • ½ paquete de queso rallado (40g)

Prende el horno y déjalo calentar a temperatura media-alta (200ºC)

Calienta una olla con agua. Por mientras pela las papas. Cuando el agua hierva, deja caer suavemente las papas en el agua, con un cucharón quizás, para que no salpique. Pon el cronómetro del celular y cuando marque 5 minutos, bota el agua sobre un colador dejando las papas estilando.

Pica fina la cebolla, ponla a dorar en una olla a fuego medio con un poco de aceite de oliva. Agrega sal y pimienta y sigue dorando hasta que se ablande, unos 3 minutos. Agrega la carne molida y con la cuchara de palo empieza a romperla para que se vaya desmenuzando a medida que se va dorando. Cuando ya esté separada en pedacitos y dorada, agrega la salsa de tomates, un poco de sal y pimienta, y mezcla bien. Baja el fuego y deja calentando con la olla tapada.

Ralla cada papa con la parte gruesa del rallador, dejándolas caer sobre una tabla o directo en un bol grande. Si están todavía muy calientes, remójalas un par de minutos en agua fría y vuelve a estilarlas. Una vez listo todo el rallado en el bol, agrega unos dos chorros de aceite, el queso rallado, sal gruesa y pimienta, y mezcla bien, incorporando todo. La papa está bien pegote, así que dale la pelea para que quede una mezcla pareja.

Apaga el fuego de la salsa de tomates y échala dentro de una fuente para horno. Repártela de forma pareja por toda la superficie. Luego, con las manos limpias, agarra un puñado de papa rallada y repártelo sobre la salsa. Repite de a poco para ir cubriendo toda la superficie y que no se asome ningún suspiro de salsa.

Hornea por alrededor de 30 minutos o hasta que la papa esté dorada. Si se cumple el tiempo y aún le falta al bronceado, sube el fuego al máximo o dale al grill si tu horno es eléctrico.

Gratín de papa rallada y boloñesa