Grandes vinos del mundo y las historias detrás de sus etiquetas
Así como hay grandes bandas musicales, edificios emblemáticos y autos de colección, también hay etiquetas que han logrado convertirse en forma unánime en grandes vinos del mundo. Sus bodegas están llenas de historias, construidas sobre la base de una reputación que mezcla sentido de origen, compromiso ineludible con la calidad y uno que otro protagonismo con figuras de la realeza, estrellas de cine o de la política. En Salú les presentamos algunos de los más míticos vinos del mundo.
Vega Sicilia
Único
España, Ribera del Duero
Variedad: Tempranillo
Es la bodega más prestigiosa de España, pero fue la cosecha del Único en 1970 que la convirtió en toda una leyenda. Muchos lo consideran el mejor vino que se ha producido en España en todos los tiempos.
El vino se lanzó al mercado 25 años después de la cosecha. Así y todo había gente que pensaba que aún no se podía beber. En 2014 la viña cumplió 150 años y desde los inicios se ha mantenido el concepto primigenio de la bodega: calidad.
La producción del Único se subdivide en 50 lotes, todo un desafío pensando en el ensamblaje final, un trabajo minucioso y constante que asegura la identidad de la casa en este gran vino, un mezcla entre equilibrio, elegancia, complejidad y pureza.
Screaming Eagle
Estados Unidos, Napa Valley
Variedad: Cabernet Sauvignon
Escaso y caro, el Cabernet de Screaming Eagle forma parte del selecto grupo de vinos de culto californianos. La bodega se fundó en 1989, pero su primera cosecha fue en 1992, de la que solo se produjeron 225 cajas.
Cuando Robert Parker le dio a este vino 99 puntos, Screaming Eagle se transformó en un súper tinto y llegó al escalón más alto de la demanda: el más caro y el más deseado de todos los cabernet californianos.
La producción aún sigue siendo pequeña: no supera las 500 cajas a un precio moderado de USD500 por botella para los consumidores inscritos en su lista de correo. En subastas supera con normalidad los USD1.000 por botella.
Domaine de la Romanée-Conti
Romanée-Conti
Francia, Borgoña
Variedad: Pinot Noir
El vino, la viña y la bodega más míticos del mundo. Dicen que este y sus otros Pinot Noir son una galaxia a parte en el planeta de los vinos. Aubert de Villaine, uno de los actuales copropietarios es un ultraperfeccionista en una región famosa por su perfeccionismo. Solo a una persona se le permite podar el viñedo de 1,6 hectáreas.
Conseguir una botella de Romanée-Conti puede ser una tarea titánica. A parte de ser muy escaso, una cosecha reciente puede estar por sobre los USD5.000 la botella, en la elite de los más caros del mundo.
Cuando un Romanée-Conti alcanza su mayor expresión, como la cosecha 2005, uno se pregunta si se puede elaborar un tinto más exquisito y complejo como este.
Giussepe Rinaldi
Barolo Brunnate-Le Coste
Italia, Piamonte
Variedad: Nabbiolo
Junto a Cappellano y Bartolo Mascarello conforman el tridente del Barolo clásico en Italia. Nombres inigualables e insuperables en la forma en como conciben el vino. La producción de un Rinaldi todavía se hace a la manera tradicional, incluidas largas maceraciones y fermentaciones y una maduración en grandes toneles de roble.
Rinaldi siempre explica que sus vinos deben esperar el mejor momento para beberlos. El tiempo debe hacer su magia: suavizar las asperezas de la juventud, para que el vino revele toda su expresión. Ningún cambio se realiza sin justificación alguna.
Los vinos de Rinadi tardan más en desarrollarse y son poderosos dentro de la elegancia de otros productores de la zona, esto debido a su mayor calidez y estructura.
Petrus
Pomerol
Francia, Burdeos
Variedad: Merlot y Cabernet Franc
El más mítico vino de Burdeos es ya un vino legendario. Solo durante el siglo XX tuvo once cosechas excepcionales, entre las que se cuentan la de 1945, la de 1961 y la de 1989. Hace un siglo ya alcanzaba precios altísimos y hoy una botella de Petrus en Francia puede encontrarse por uno 4 a 5 mil euros.
Petrus proviene de un viñedo de 11,5 hectáreas plantadas en un 95% de Merlot y el resto de Cabernet Franc, de suelos arcillosos con un marcado contenido de hierro. El resultado es un vino poderoso y de muy larga vida, del que se producen unas 40 mil botellas anuales.
Petrus ha sido descrito como un vino de increíble potencia, profundidad y riqueza, aunque posee un delicado balance que ayuda a su longevidad. No es brutal ni concentrado y muchas veces su nariz es un suave abanico de aromas con una marcada nota mineral.
Penfolds
Grange
Australia, Australia del Sur
Variedad: Syrah y Cabernet Sauvignon
El primer Penfolds Grange fue elaborado en 1951 y una botella de esa añada se vendió luego en una subasta en 2004 en casi USD40 mil. Así es el buque insignia de la bodega más importante en Australia, ese que cada 1 de mayo pone a la venta una nueva cosecha que ha sido guardada por 5 años.
Como todo gran vino, siempre hay una historia similar antes de convertirse en una etiqueta codiciada. Asombrosamente, Grange no encontró compradores para su primera cosecha. Su descubrimiento fue en 1960, cuando un miembro del consejo de Penfolds pidió que se volvieran a probar las primeras añadas. Al volver a la sede de la empresa en Sidney difundió la noticia: el vino iba camino a convertirse en una leyenda.
Château Latour
Pauillac
Francia, Burdeos
Variedades: Cabernet Sauvignon, Merlot y Petit Verdot
Una bodega con más de 300 años de historia. Latour se destaca a nivel mundial por su nivel de coherencia y consistencia que ha cruzado siglos y decenas de generaciones. Las vides de raíces profundas se aferran a suelos con un alto contenido de gravas, que corresponden en su mayoría a Cabernet Sauvignon.
Un Gran Vin de Château Latour necesita por lo menos 10 años antes de descorcharse. Antes, es muy difícil poder apreciar todo el carácter de ese terroir tan especial en Burdeos. Una copa de Latour tiene una nariz maravillosamente floral, con unos taninos potentes, pero con una suave acidez que lo han convertido en un superventas, tanto así que han aparecido muchas botellas falsificadas que han engañado a compradores en distintas partes del mundo.
Château d’Yquem
Sauternes
Francia, Burdeos
Variedades: Semillón y Sauvignon Blanc
Un aviso de subasta en París de diciembre de 2008 anunciaba un lote vinos muy particular: una caja con tres botellas de Château d’Yquem: 1800, 1900 y 2000. Tres siglos de Yquem, comentó en su momento el encargado del evento, se convertían en el lote más extraordinario y sorprendente de la historia.
Yquem es el vino dulce más famoso del mundo. Como promedio, solo se producen unas 65 mil botellas al año. Sus mejores añadas pueden beberse en su juventud con gran placer, pero seguramente podrán durar un siglo guardados. Es un perfecto equilibrio de fruta, botritis, azúcar y acidez.
Está documentado que Thomas Jefferson, cuando era embajador de Estados Unidos en Francia y antes de ser presidente quedó maravillado con la cosecha de 1784, que mandó a embotellar especialmente para él.