Este vino azul, como el mar AZUL

Como dice la canción de Cristián Castro “Azul”, esta rareza de color azul es de origen Español. En 2016, de la mente de un grupo de nuevos negociantes, nació el primer vino de color azul: GIK. No se debe confundir estos vinos azules con los espumosos producidos en Francia, catalogados Vin Blue.

Hoy en día es muy fácil hallar una diversidad de marcas más extensa de este vino azul en vinotecas de todo el planeta, inclusive en enormes superficies de supermercados de Europa que ya lo tienen en sus estanterías.

LA COLORACIÓN DEL VINO AZUL

La coloración del vinito azul se consigue por medio de un complejo llamado antocianina. De distintos frutos y vegetales, como la mora, los arándanos o el hollejo de las uvas tintas, se consiguen los pigmentos necesarios para ofrecerle al vino un color azul característico. Cada Bodega tiene su propio desarrollo. El vino Marqués de Alcántara (vino español) consigue el color azulado de los pigmentos extraídos de la piel de uvas tinta, que más adelante se mezcla con Chardonnay para hallar el resultado definitivo.

Es sustancial resaltar que las antocianinas forman parte del grupo de los flavonoides. Que como buenos antioxidantes que son, tienen increíbles provechos anticancerígenos y antienvejecimiento, demostrados por estudios elaborados por prestigiosos laboratorios ¡Una maravilla po!

Más allá de que los vinos azules están siendo cuestionados por críticos y enólogos que denuncian que este no es un vino clásico, hay que decir que el vino azul tiene aroma a vino. Aunque en el momento de catarlo no lo deberíamos calificar de esta manera que los vinos habituales. En su cata se perciben con nitidez notas de fruta tropical, melocotón en almíbar, gominolas y manzana.

En boca las experiencias son semejantes a un blanco Chardonnay, pero resulta más untuoso en el final del trago. Es refrescante y perfecto para evaluar en una fiesta o en un aperitivo. 

¿Ganas de un azulito? Salú!

 

Fuente: catadevinos.eu 

 

Este vino azul, como el mar AZUL