Caracoqueso Fast Solo
1 persona • 30 minutos
- 1 taza de caracoles
- 1 láminas de queso cheddar (del de verdad) o mantecoso
- 1 cucharada de mantequilla
- 1 cucharadita de harina
- ½ taza de leche
- 1 cucharada de pan rallado (opcional)
Prende el horno a temperatura máxima (si tienes de esos chicos eléctricos, mejor usa ese). Hierve agua en una olla mediana y ten a mano todos los ingredientes.
Cuando hierva echa un chorrito de aceite, un poco de sal y los caracoles. Pégale una revolvida.
Aquí con concentración para ganarle a los caracoles:
En otro quemador pon una olla chica a fuego mínimo. Echa la mantequilla y una vez que se derrita toda, toma un batidor manual (o un tenedor) con una mano y con la otra echa la harina. Revuelve rápido para que se disuelva bien. Deja calentar por 1 minuto y luego agrega la leche, de a poquito y revolviendo sin parar. Cuando la mezcla ya esté caliente (tócala con el dedo) rompe en pedazos el queso y déjalos caer dentro de la olla. Echa un poco de sal, pimienta y algún polvillo preferido… merkén para el buen picor, por ejemplo. Sigue revolviendo; el queso se va a ir disolviendo. Un par de minutos más tarde, la mezcla va comenzar a tomar espesor. Apenas notes eso, apaga el fuego y revuelve un poco más.
Si salió flor la cosa, la pasta debiera estar justo. Prueba un caracol para ver si ya está al dente. Cuélalos y de vuelta a la olla. Echa al tiro la salsa y mezcla bien. Que ese bálsamo se adentre en los interiores de cada caracol. Si tienes pan rallado, echa la mitad de la cucharada y mezcla un poco.
Echa todo en un bowl de greda o algo chico para el horno. Echa el resto del pan rallado encima y para un dorado estelar, una lámina de mantequilla arriba.
Hornea hasta que se doren por arriba, unos 10 minutos aprox.